Mi otro Yo

jueves, 4 de octubre de 2007

Nací hace más de 28 años, en San Miguel de Tucumán, provincia de Tucumán, República Argentina.

Me inicié en el periodismo en 1999, en el desaparecido diario El Periódico, desempeñándome como redactor en la sección Deportes. Ahí aprendí algunas de las mañas que esta profesión require. Son muchas. Voy por más.

Esa decisión marcó mi vida. Todavía no se si para bien o mal, pero lo cierto es que desde ese momento me convertí en periodista.

Deambulando con un oficio para nada extraordinario me topé con la radio. Un puñado de amigos y un micrófono bastaron para que uno despunte el vicio. Así recorrí los estudios de las emisoras tucumanas Rock & Pop, Contacto, Antena 8 y CUB (creo que desapareció; sino, ojalá...).

Mis estudios en la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino finalizaron en marzo de 2001. Ya estaba habilitado para trabajar, aunque... En fin, mi diploma dice "Lic. en Comunicación Social". Nunca le di demasiada importancia. Pero más adelante verán cómo sirvió. Por supuesto, no me gradué con honores ni nada por el estilo.

Apenas seis meses después otro amigo me propuso comenzar "el emprendimiento de nuestras vidas". ¡Vaya si tenía razón! Trabajamos como nunca para lanzar una publicación especializada en rugby, uno de los deportes más importantes de nuestra ciudad. Pero nunca tuvimos ni una pizca de astucia empresarial. Nacimos en octubre y morimos en diciembre. Se llamó “Try, Pasión por el rugby” y el vació que nos dejó jamás podrá ser remendado.

El desbarajuste nacional de aquella época me llevó a buscar una salida rápida y económicamente más sustentable: abandonar el periodismo. Duré menos de 12 meses haciendo otra cosa. Ahí descubrí que ser escriba no tiene precio. O sí, tal vez, el del dueño de un medio.

En julio de 2003 volví a la actividad pero reconozco que no fue nada sencillo. Hablar sobre instalaciones eléctricas y decoración de interiores nunca fue mi fuerte. ¡Y vaya uno a saber el de quién! En la revista especializada “Arquitectura y Construcción”, de Tucumán, comencé a dar los primeros dolores de cabeza. Por obvias razones, dejé de trabajar en menos de 6 meses. Mi celular no ronroneó más.

Por suerte siempre existen amigos que aparecen cuando ya no hay dónde golpear ni ánimo con qué hacerlo. Ahí apareció el turno a internet, un campo que en Tucumán era poco explotado allá por 2004. Como redactor del diario digital TucumánDiario recuperé la estima por mi trabajo. Jamás me hubiera imaginado que desde ese momento iba a desear pasar conectado al menos 8 horas al día. Pero el papel siempre tira, o mejor dicho, sobra por estos pagos. Así fue como terminé trabajando como redactor y editor del periódico mensual especializado en automovilismo “Ruedas”. Y siguiendo en esa misma temática, El Diario Compacto me tuvo como redactor y encargado de la sección de deportes hasta marzo de 2005. Nunca entenderé cuáles son los motivos por los que en Tucumán hay tantos periodistas y publicaciones en relación con la cantidad de habitantes.

Pero por esas cosas de la vida, en marzo de 2005 me instalo por 16 meses en Buenos Aires. Una beca para cursar la Maestría en Periodismo de Clarín hizo todo más sencillo. Así tuve la posibilidad de colaborar con la revista española, especializada en Latinoamérica, Zona de Obras, y en la Revista G7, especializada en música, moda, publicidad y diseño . Y gracias al plan de estudio de la Maep hice una pasantía junto al equipo de producción del programa Deportivo, de la señal de cable Todo Noticias (TN), como práctica de la cátedra Televisión I. De la misma forma, deambulé durante cuatro meses en la sección deportes de Clarín.

En ese mismo año le comencé a dar forma a mi blog, desde donde trato de poner énfasis en las últimas noticias relacionadas con los medios de comunicación, curiosidades puramente subjetivas y algo de música. Claro, dándole una bajada local.

Sin embargo, julio de 2006 me tuvo una vez más en Tucumán de regreso al diario digital TucumánDiario. También comencé a colaborar con la sección deportes del diario El Siglo, haciendo la cobertura de todos las disciplinas menores que poco interés despertaban en los demás. En esa etapa, inicié una serie de colaboraciones para la revista de comunicación interna “Refinotas”, de la compañía petrolera Refinor SA, con sede central en la provincia.

Y como nunca me conformo con nada, y mucho menos puedo quedarme quieto, diciembre de 2006 me encontró en Ezeiza, tal vez la única salida para la ciclotímia nacional de la que culturalmente no podré escapar jamás. Una larga gira me llevó a los Estados Unidos y finalmente a Europa, en donde cubrí para mi blog la serie de cuartos de final de la Copa Davis entre Argentina y Suecia, disputada en Gotemburgo.

De vueltas por el pago, en septiembre de 2007, junto a un grupo de locos itinerantes le dimos forma a los semanarios especializados en San Martín de Tucumán y Atlético Tucumán, los dos clubes de fútbol más importante de la zona, denominados “Sólo Santo” y "Sólo DK", en los qu disfrutamos de ser nuestros propios editores. Lamentablemente, los empresarios periodísticos tucumanos no acompañaron. Bah, ni siquiera nos pagaron.

Ahora paso el verano cubriendo suplencias por vacaciones en la sección Policiales del diario El Tribuno de Tucumán, un emprendimiento de tres grupos empresarios (de Santiago del Estero, Catamarca y Salta) que pretende, a largo plazo, cortar la hegemonía de La Gaceta, el más grande.

Se fueron los calores y mi temporada como guardavidas terminó. Mientras esperaba que volviera la luz me las arreglé dando vueltas en La Noticia Ya! y en EscapadasEuropa, dos buenas experiencias digitales a las que subí sin demasiadas expectativas pero dieron resultados.

Ya en junio, y después de una semana en la Dirección de Comunicación Institucional de la UNT, me sumé al equipo de trabajo de Telemática, una empresa tucumana especializada en desarrollo web, hosting, e-marketing y que en breve planea desarrollar contenidos.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Boy. Un abrazo grande desde Sao Paulo. Con mucha chuva... Espero verte pronto en Buenos Aires. Juan Rial.

Karina dijo...

En tu entrada, hablás de tu experiencia como pasante en la maestría de periodismo. Yo estoy por iniciar esa maestría. Qué tal ha sido la experiencia? Eran rentadas? Saludos.

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